Mi primer película de Xavier Dolan fue "Los amores imaginarios" en 2010. Me engancho su historia de dos amigos interpretados por la elegante Monia Chokri y el propio Xavier, que caen rendidos ante el chico rubio recién llegado del campo, Niels Schneider. Me llamo la atención su manera de filmar, entrelazando testimonios de jóvenes desencantados con el amor, ademas de su uso del color y de la música que acompañaba perfectamente cada escena de aquel desesperado triángulo amoroso. Me preguntaba que vendría después de ganar el Gran Premio del Jurado de Cannes con la adaptación de la obra de Jean-Luc Lagarce: "Sólo el fin del mundo".
La respuesta la hallamos en este film que habla de las decisiones que hay que tomar en la vida, las que te la revolucionan y te la cambian en absoluto. Durante una reunión de amigos, la hermana del anfitrión donde pasan el finde, trata de convencer a algunos para participar en el rodaje de un corto para la uni. Matthias y Maxime terminan participando y a raíz de esa escena del corto comienzan a preguntarse cuáles son sus verdaderos sentimientos, afectando su presente y llenándolo de angustias y dudas sin resolver.
Puede que el cine de Dolan no convenza a muchos cinefilos, que sea ruidoso, embarullado o encallado en una eterna juventud, pero yo a un autor le pido honestidad, no que le baile el agua a otros... y el cuenta su historia a su manera. A mi me ha gustado mucho, esa es la verdad.
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